El Bikram Yoga cambió mi vida. Ahora dedico mi vida a compartir los beneficios del Bikram Yoga con el resto del mundo. Entra, relájate y… ¡disfruta!
Todos tenemos ego, pero no sabemos lo grande que es hasta que nos enfrentamos a él… Nos hemos creado una imagen de nosotros mismos a lo largo de nuestra vida, ayudados por nuestros amigos y nuestra familia. Creemos que somos listos, simpáticos y graciosos, tenemos muchos amigos que nos ríen las gracias, pero pocos que nos dicen las cosas a la cara. Y tienes que tener en cuenta que esos son los verdaderos amigos: los que te dicen la verdad, aunque duela. Por desgracia, vivimos en un mundo en el que la verdad no cuenta, impera la mentira y la hipocresía, la gente hace lo que sea por quedar bien con los demás, olvidando principios y valores.
Practicando Bikram Yoga te enfrentarás a tu ego, puede que sea la primera vez, puede ser doloroso y frustrante, te lo advierto. Lo sé porque he visto a muchos alumnos llorar en clase o al terminar. También hay alumnos a los que no he vuelto a ver, porque no han querido volver después de esa experiencia traumática. Es posible que, si tu ego es muy grande, no aceptes fácilmente que alguien como yo te diga lo que tienes que hacer, cómo te tienes que comportar. Pensarás que eres muy listo y que lo sabes todo, te preguntarás cómo me atrevo a llamarte la atención. Pero te aseguro que lo hago por tu bien y espero que al final lo entiendas.
Yo también pasé por esa amarga experiencia durante mi Teacher Training, cuando viví inmerso profundamente en el mundo de Bikram Yoga durante nueve semanas. Estábamos mucho tiempo encerrados en aquel hotel de Los Angeles, practicando dos veces al día y estudiando a fondo el diálogo de las posturas, que luego debíamos representar ante los demás. Algunos profesores nos juzgaban y criticaban, a veces duramente. A mí me ocurrió en la quinta o sexta semana: un profesor me dijo algo que no me gustó y me sentó fatal. Recuerdo que me pasé todo el día triste y amargado, llorando por dentro de rabia, sin querer hablar con nadie sobre ello…
Entonces recordé lo que Bikram Choudhury nos había dicho: que todos tendríamos nuestro breakdown antes o después a lo largo de esas nueve semanas. Que enfrentarnos a nuestro ego supondría un punto de inflexión en nuestro entrenamiento, un gran obstáculo que tendríamos que superar. Aquella noche reflexioné sobre ello y asumí que había llegado mi breakdown, que a partir de entonces no iba a llorar ni a sufrir, que tendría que aprender de aquello para hacerme más fuerte y seguir adelante. Y así lo hice: desde aquel día disfruté a tope del training y no volví a llevarme un mal rato, traté de ser feliz y ayudar a los demás a serlo.
Tú también puedes dominar tu ego y te aseguro que practicar Bikram Yoga te ayuda a conseguirlo. Porque pasar noventa minutos enfrentado a tu verdadero yo en el espejo te ayudará a verte como eres en realidad. Verás que no eres tan fuerte y duro como creías, te enfrentarás a tus defectos físicos y tus carencias emocionales. Día a día te irás reconciliando con la imagen que ves en el espejo, aprenderás a aceptarte y a quererte un poco más, serás capaz de reconocer tus errores y tratar de corregirlos. Con paciencia y esfuerzo dominarás tu ego y crecerás como persona, encontrando la paz y la armonía contigo y con los demás.
Mmmm…no sé…no sé…
Desde el otro lado es muy interesante observar como se muestra el Ego en los instructores de Bikran.
🙂
¡Interesante comentario Gloria! Por supuesto, ya ves que mi texto comienza «todos tenemos ego» y seguro que el de algunos profesores de Bikram Yoga también es demasiado grande… Creo que es importante dominarlo, porque como he dicho en otros artículos, el profesor debe ponerse en el lugar de los alumnos, ellos son los más importantes en la clase, y no él… Gracias y salu2
Carlos, enfrentarse al ego es sin duda la lección más dura pero es la más necesaria. Yo siempre aprendo algo nuevo en cada clase de yoga, incluso en las «malas». Ayer tuve una clase de ésas en las que el cuerpo no responde y uno lo pasa realmente mal. Bueno, pues decidí que lo mejor era aceptar cómo me encontraba, intentar hacer lo mejor posible, no enfadarme y disfrutar al máximo de lo que pudiera en la clase. No me salieron las mejores posturas, pero estuve amable y relajada conmigo misma. Y me quedo con eso. Hace unos meses habría salido baja de moral de la clase.
Gloriacruz, efectivamente hay algunos profesores de Bikram que tienen un ego que no cabe en el estudio. Yo lo que hago es flitrar la parte de ego de sus comentarios y escucho la parte útil.Y si no encuentras la parte útil directamente ignóralos. Que no te amarguen tu clase de yoga.
Muchas gracias por comentar Silvia! Me alegra que el bikram yoga te haya enseñado a dominar tu ego, es una más de las muchas cosas que nos enseña este maravilloso yoga que ambos compartimos… Salu2 y hasta pronto